El cubo de Agua - Pekín

Pekín ha abierto hoy las puertas del Centro Acuático Nacional, conocido popularmente como "El Cubo de Agua" por su estructura rectangular, cubierta por unas singulares membranas plásticas poliédricas que permiten el paso de la luz natural y que lo han convertido en uno de los proyectos estrella de los Juegos Olímpicos.
Durante los Juegos Olímpicos, el Cubo tendrá capacidad para acoger a 17.000 espectadores gracias a los 11.000 asientos supletorios de los que estará dotado y que se retirarán una vez finalice la cita deportiva, cuando se convertirá en un centro lúdico al alcance de todos los pequineses. El edificio, al que se accede a través de puentes, está rodeado de un foso con agua, forma un conjunto arquitectónico con el otro gran proyecto de estos Juegos, el Estadio Olímpico o "Nido", ambos equidistantes del eje norte-sur de Pekín. Han sido necesarios cuatro años, 6.700 toneladas de acero y 1.300 toneladas de varillas para levantar esta obra, diseñada por el arquitecto australiano John Pauline y construida sobre una superficie de 80.000 metros cuadrados.
Más de 110 millones de dólares (75 millones de euros) han sido necesarios para levantar el Cubo, aportados íntegramente por Macao, Hong Kong y Taiwán, por lo que según el BOCOG (Comité Organizador de Pekín 2008) esta construcción representa los buenos deseos, la solidaridad y el compromiso del pueblo chino con los Juegos OLímpicos. Durante la cita deportiva del próximo verano se repartirán 42 medallas de oro en el interior del Cubo, en las disciplinas de natación, saltos y natación sincronizada.